miércoles, 25 de marzo de 2015

Con los ojos cerrados.

Creo en ti. 
En la porcelana que asoma de tu boca al sonreír.
En los abrazos que salvan días.
En que en tus manos reposan cómodas mis ganas de vivir.
En las horas que invertí en escribir biblias sobre tu espalda. 
En los que nunca me faltes que nunca te digo y dibujo con la mirada,
cuando no me miras.
En tus manos de niña pequeña agarrándose a mi espalda pidiendo que te estremezca.
En que cada amanecer es distinto cuando te quiero menos y te echo de más.

En que el cielo es lo más parecido a mirarte de frente y no saber qué decir.
En las palabras que escondo en la almohada por si algún día creo en nosotros,
Y no tanto en mí contigo a ratos breves.


domingo, 8 de marzo de 2015

Tan niña loca.

El problema de ser yo, es ser demasiado libre.
Demasiado niña loca, con maletas hechas para ir a ninguna parte.
Que no hay correas cortas que puedan atarme el cuello, las excepciones no duran mucho tiempo.

Porque la cruel sensacion de sentirse "cómo un animal en una jaula" me asfixiaba tanto que por eso había días en los que no quería mirarme al espejo o salir de la cama.
Deseaba escapar.
Escapar lejos sin correr en círculos.

Yo sólo soy esto,
un pequeño ser sensible al que le gusta autodestruirse, huir,
y tal vez algo de distracción por el camino.


A pesar de tener el corazón roto, los ojos hinchados de llorar...
Sé que esto es lo mejor que podía pasarme, no tener correa.
Vivir sin reloj,
despertar tomando bocanadas de aire antes de empezar un nuevo día que nunca sé dónde va a terminar.
Posar desnuda para fotografías indecentes, sentirme nuevamente la guinda del pastel rosa.


"Todos quieren tocar pero nadie la toca porque nadie es suficientemente bueno".


Una muñeca rota con la cara perfecta y horas de conversaciones interesantes para quien desee acompañarme con un poco de alcohol y tabaco.
Que tal vez vivir con este vacío no está tan mal, al menos hoy no.

Me lleno de personas que creí que no conoceria nunca,
hago cosas que jamás pensé que haría, y todo esto es porque vivo fuera de la jaula,
porque soy libre, porque soy un toro loco que desea experimentar demasiadas cosas que alguien normal jamás podría darme.

"La normalidad es bella hasta que se transforma en mediocridad".
Y creo recuperar poco a poco ese algo que me hacía ser feliz, estar rodeada de gente y ver que soy superior a todo esto.

"La tristeza no nos durará hasta la muerte".
Y podría vivir siglos enamorada de ti, pero entiendo que los caminos con alguien como yo no son fáciles.
Que nadie puede domésticar a un corazón deseoso de saber y enamorado de la idea del amor sin barreras.

"Porque esta vez tal vez será mejor marcharse".
La decepción me guía y los hechos nos definen.
No deseo otras bocas,
deseo vivir privándome de ese capricho que no desemboca en ningún océano en el que me apetezca nadar.

Deseo vivir, vivir mucho , vivir intensamente, vivir deprisa sin dormir más de 6 horas diarias.
Deseo dejar de amar para ser más libre.
"Ya no muerdo el agua por ti".


lunes, 2 de marzo de 2015

El amor coloca

Cuando lo único que empieza a importarte eres tú y lo que tú quieres,
cómo lo quieres y cuándo,
es la señal de que algo por dentro te está cambiando,
cuando antes te tragabas cualquier cosa sólo porque era lo único que podías hacer.
Tragar lo que sea sólo por amor y eso no es suficiente para mi "yo" de hoy en día.

Nadie debería tragar cristales por nadie.
Los caminos están llenos de desvíos, piedras y baches.
Por mucho que te guste tu paseo, su pelo huela bien y sepa quererte a ratos.
Y el querer a ratos es para gente que no sabe enamorarse y fluir.

Aprender a elegir y decir basta, que ya está bien, que así no.
Que quiero esto y si no me lo das me largo a quererte a distancia porque dueles demasiado.

Es lo más complicado del universo.
Pero más complicado es implosionar sin hacer nada de ruido.